miércoles, 12 de noviembre de 2008

Que si el pez chico, David y Goliat, la figura del matagigantes ha vuelto.



Afortunadamente dentro de un deporte envilecido por el dinero, la épica del pez chico que se come al grande aún existe y demuestra que el compromiso de 11 honrados obreros del balón puede conseguir la proeza de llevarse por delante a todo un histórico, plagado de "stars systems", con todos los flashes pendientes de algún recorte de pelo o la eterna caída de su vieja estrella (disimulada a base de goles, el que tuvo, retuvo). Pues esta rebelión de los humildes fue liderada ayer, martes 11 de noviembre, por el Real Unión Club de Irún, equipo guipúzcuano fundado en 1915, aunque sus orígenes se remontan a 1902, que juega actualmente en 2ªB. Es, por cierto, uno de los historicos del balompié español, cofundador de la liga española y cuatro veces ganador de la copa del rey, la primera en 1918 curiosamente ante el rival ayer derrotado, el todopoderoso Real Madrid, equipo del régimen por antonomasia( lo que no importa es el tipo de régimen, ellos permenecen ahí como institución.....podrá llegar bajo el júbilo popular la tercera republica, pero el madrid no bajara a segunda, creo que es una disposición adicional de todas las constituciones, cartas otorgadas, estatutos reales........), el hacedor de portadas, el equipo del país ( hay muchas dudas en torno a la cohesión nacional, pero en esto todos coinciden, sea como halago o insulto)......
Seguimos con el pez chico, mucho mas interesante a mi modo de ver. El Real Unión tuvo su época dorada en los años 20 y su declive comenzó con el auge del profesionalismo en los inicios de los 30, cuando los equipos con mas dinero se llevaron a sus mejores jugadores. Viste con camiseta blanca, pantalon negro y medias negras y juega en un estadio que apenas si puede albergar a 6000 espectadores. Este es un pequeño homenaje al Real Unión, ultimo matagigantes del balompié. Como siempre, los humildes acaban dotando de sentido al sistema por injusto que sea, el sueño americano hecho realidad, la justificación perfecta para los que nos apasiona este deporte pero tenemos cargo de conciencia por el negocio en el que se ha convertido, "fue un humilde electricista y se ha convertido en ministro, que grande es nuestra democracia".......en fin, las injusticias de base seguirán existiendo, en asuntos importantes como los políticos o aparentemente triviales como en el futbol, pero mientras el pez chico se coma alguna vez al grande, la ilusión de igualdad nos pondrá la careta de felices, de confianza en nuestro sistema de valores y en las instituciones que nos representan. Aún así, vuelvo a picar y sueño con la llegada de la tercera republica y el madrid en segunda, así de ilusos somos algunos.

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